domingo, 10 de mayo de 2009

Novena de Fátima (7)

El día 13 de mayo la Iglesia recuerda litúrgicamente a María Santísima aparecida en Fátima. Estoy publicando durante estos días la novena preparatoria a este día para durante nueve días meditar, en este mes mariano, sobre los anuncios de Fátima, para llegar preparados al 13 de mayo. Ese día tan bello, en que recordamos el mensaje de amor y aviso urgente que María nos dejó en Fátima y que todo el mundo debe conocer. Tomo la novena de la página web "http://www.devocionario.com/" y pongo aquí la oración correspondiente al septimo día. Sucesivamente iré publicando las de los otros días. En Radio María España se rezará cada día de la novena tras la hora de Sexta (12:10).

OFRECIMIENTO

¡Oh Dios mío! Yo creo, adoro, espero y os amo. Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman.

¡Oh santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo! Yo os adoro profundamente y os ofrezco el preciosísimo cuerpo, sangre, alma y divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes con que El es ofendido; y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón e intercesión del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pecadores.

ORACIÓN PREPARATORIA

Oh santísima Virgen María, Reina del Rosario y Madre de misericordia, que te dignaste manifestar en Fátima la ternura de vuestro Inmaculado Corazón trayéndonos mensajes de salvación y de paz. Confiados en vuestra misericordia maternal y agradecidos a las bondades de vuestro amantísimo Corazón, venimos a vuestras plantas para rendiros el tributo de nuestra veneración y amor. Concédenos las gracias que necesitamos para cumplir fielmente vuestro mensaje de amor, y la que os pedimos en esta Novena, si ha de ser para mayor gloria de Dios, honra vuestra y provecho de nuestras almas. Así sea.

ORACIÓN DE ESTE DÍA (María, alivio de las almas del purgatorio)

¡Oh santísima Virgen María, Reina del purgatorio!, que enseñaste a los pastorcitos de Fátima a rogar a Dios por las almas del purgatorio, especialmente por las más abandonadas. Encomendamos a la inagotable ternura de vuestro maternal Corazón todas las almas que padecen en aquel lugar de purificación, en particular las de todos nuestros allegados y familiares y las más abandonadas y necesitadas; alíviales sus penas y llévalas pronto a la región de la luz y de la paz, para cantar allí perpetuamente vuestras misericordias.
ORACIÓN FINAL

¡Oh Dios, cuyo Unigénito, con su vida, muerte y resurrección, nos mereció el premio de la salvación eterna! Os suplicamos nos concedas que, meditando los misterios del santísimo rosario de la bienaventurada Virgen María, imitemos los ejemplos que nos enseñan y alcancemos el premio que prometen. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Lugar del bautismo de Cristo

Hace escasos minutos el Santo Padre ha llegado al lugar que la tradición marca como donde San Juan Bautista bautizó al Redentor, a las orillas del río Jordán, en actual territorio del Reino de Jordania. A las 18:00 de Ammán y 17:00 de Roma el Papa bendecirá las primeras piedras de las iglesias de los latiinos y los greco-melquitas en Betania. Esa Betania no es la de Lazato, sino un pueblo en Jordania, junto a ese lugar que la tradición cita como el del bautismo del Señor. En cuanto pueda iré publicando los discursos del Papa en el día de ayer y los de hoy, a parte de hacer un artículo sobre la Misa que el Papa ha celebrado hoy en Ammán, en preciosa continuidad con la Tradición Católica. Mientras tanto, paso a describir ese lugar que el Papa está visitando ahora mismo.

En (Jn. 1,28) podemos ver que se nos dice que Juan bautizaba "al otro lado del Jordán". En (Jn. 10) se dice que Cristo vino también al "otro lado del Jordán" cuando los judíos intentaban prenderle. Por ello, ese lugar que la tradición marca como el del bautismo de Cristo tiene todas la papeletas para serlo realmente. Dicho lugar está al lado de un pueblo llamado Betania (no la de Lazaro). Ese lugar está en un lugar algo verde, o al menos más verde que el resto del reino jordano. En el mismo río existe una instalación que es como una pasarela medio sumergida y que es por donde pasan aquellos que van a bautirzarse en el mismo lugar en el que Nuestro Salvador, al bautizarse, purificó toda el agua necesaria para nuestros bautismos, "se puso a la cola". Al lado de ese lugar en el que se puede tener la suerte de ser bautizado en el mismo lugar que Cristo existe una especie de capilla en la que hay una gran pila bautismal, en la que se puede ser también bautizado. Este lugar está en una zona paramilitar y el acceso solo está permitido en días puntuales durante el año.

Es este lugar el que el Vicario de Cristo está visitando ahora mismo. Unámonos pues al Santo Padre, al Precursor, y a Nuestro Señor Jesucristo, visitando espiritualmente el lugar que de manera indirecta recordamos cada jueves en el primer misterio luminoso.

sábado, 9 de mayo de 2009

Benedicto XVI llega al Monte Nebo

Como saben, el Santo Padre ha visitado esta mañana el Memorial de Moisés, en el Monte Nebo. Mientras esperamos a una traducción de sus palabras pongo aquí las palabras con las que el ministro general franciscano ha recibido al Papa a su llegada al lugar:

"Santo Padre, le doy la bienvenida en nombre de todos los frailes menores que viven en Tierra Santa y de toda la Orden con el saludo de san Francisco: ¡Que el Señor le dé la Paz!

Aquí, sobre el Monte Nebo, a las puertas de la tierra prometida, le damos la bienvenida en el comienzo de su peregrinación a Tierra Santa. Aquí Moisés, al finalizar el éxodo, tuvo la garantía de que vería la tierra que el Señor había prometido a su pueblo. La promesa de Dios se hacía finalmente realidad. Moisés había guiado a Israel durante cuarenta años, durante cuarenta años había sido la voz de Dios para el pueblo y la voz del pueblo ante Dios. Él recibió del Señor la ley y la consignó al pueblo de Israel para que la observara. Ayudó al pueblo a crecer en la fe, exhortándolo y sosteniéndolo en los momentos de desánimo, pero también amonestándolo y reprendiéndolo cuando la tentación de las cebollas que comían en Egipto se hacía más fuerte. Gracias a Moisés Israel había aprendido a conocer mejor a su Señor: un Dios providente que no abandona jamás a su pueblo; que durante el camino es la luz que alumbra en las tinieblas y descanso en las fatigas; que va al encuentro de sus hijos con el maná caído del cielo y con el agua de la roca; que desciende a una tienda para estar en medio de ellos y con ellos se hace peregrino. Moisés de esta forma no sólo guió al pueblo de la Alianza hacia esta tierra sino que, sobre todo, lo condujo hacia su Señor y Salvador.
Santo Padre, usted hoy ha querido hacerse peregrino, recordándonos que esta es la condición del pueblo de Dios. En este viaje no está solo. Queremos acompañarle, queremos seguirle, como en un tiempo el pueblo de Israel siguió a Moisés y se dejó conducir por él. También nosotros hoy nos sentimos como en el desierto y tenemos necesidad de que alguien que nos conduzca hacia el Señor, de alguien que nos ayude a conocerlo siempre más como un Padre providente y misericordioso, como nuestro Señor Jesucristo nos lo ha revelado. Con frecuencia nos invade el desánimo y el miedo cuando el camino se hace áspero y duro. Hay veces en que parece que el mal prevalece. Dondequiera que dirijamos la mirada, vemos guerras y violencia. Una gran parte de la humanidad está sometida bajo la pobreza mientras que los derechos humanos más elementales son pisoteados. Por la sed de riqueza y de poder los hombres no dejan de devastar la creación, que se les había entregado para que la cuidaran. La fe en la promesa de la tierra donde fluyen leche y miel, del Reino que crece sin hacer ruido, como el pequeño grano de la mostaza, corre el riesgo de desvanecerse en nuestros corazones y nos invade la tentación de dejar el arado y volver la vista atrás. Aquí, sobre este monte, un hermano nuestro, fray Michele Piccirillo, al que hace poco el Señor ha llamado a su seno, ha dedicado la vida entera para permitirnos gustar la belleza de estos lugares, sacando a la luz obras maestras perdidas y sepultadas desde hace siglos. Su obra, además de un inmenso valor científico, nos enseña que está en la naturaleza profunda del hombre el caminar siempre a la búsqueda de la verdadera belleza.

Santidad, en esta peregrinación nos confiamos a usted. Lleve nuestras súplicas al Señor y diríjanos una vez más aquella Palabra, que es la única que nos puede dar la salvación. Ayúdenos a descubrir la belleza de nuestra vocación, la belleza de ser discípulos del Resucitado. Entonces, como los discípulos, tendremos el valor de dejar a nuestras espaldas nuestro vivir cómodo y seguro para ponernos de nuevo en marcha por los caminos del mundo, testimoniando a todos la alegría de la Pascua.

Fray José Rodrígez Carballo ofm
Ministro general "

Novena de Fátima (6)


El día 13 de mayo la Iglesia recuerda litúrgicamente a María Santísima aparecida en Fátima. Estoy publicando durante estos días la novena preparatoria a este día para durante nueve días meditar, en este mes mariano, sobre los anuncios de Fátima, para llegar preparados al 13 de mayo. Ese día tan bello, en que recordamos el mensaje de amor y aviso urgente que María nos dejó en Fátima y que todo el mundo debe conocer. Tomo la novena de la página web "http://www.devocionario.com/" y pongo aquí la oración correspondiente al sexto día. Sucesivamente iré publicando las de los otros días. En Radio María España se rezará cada día de la novena tras la hora de Sexta (12:10).

OFRECIMIENTO

¡Oh Dios mío! Yo creo, adoro, espero y os amo. Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman.

¡Oh santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo! Yo os adoro profundamente y os ofrezco el preciosísimo cuerpo, sangre, alma y divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes con que El es ofendido; y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón e intercesión del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pecadores.

ORACIÓN PREPARATORIA

Oh santísima Virgen María, Reina del Rosario y Madre de misericordia, que te dignaste manifestar en Fátima la ternura de vuestro Inmaculado Corazón trayéndonos mensajes de salvación y de paz. Confiados en vuestra misericordia maternal y agradecidos a las bondades de vuestro amantísimo Corazón, venimos a vuestras plantas para rendiros el tributo de nuestra veneración y amor. Concédenos las gracias que necesitamos para cumplir fielmente vuestro mensaje de amor, y la que os pedimos en esta Novena, si ha de ser para mayor gloria de Dios, honra vuestra y provecho de nuestras almas. Así sea.

ORACIÓN DE ESTE DÍA (María, refugio de los pecadores)

¡Oh santísima Virgen María, refugio de los pecadores!, que enseñaste a los pastorcitos de Fátima a rogar incesantemente al Señor para que esos desgraciados no caigan en las penas eternas del infierno, y que manifestaste a uno de los tres que los pecados de la carne son los que más almas arrastran a aquellas terribles llamas. Infundid en nuestras almas un gran horror al pecado y el temor santo de la justicia divina, y al mismo tiempo despertad en ellas la compasión por la suerte de los pobres pecadores y un santo celo para trabajar con nuestras oraciones, ejemplos y palabras por su conversión.
ORACIÓN FINAL

¡Oh Dios, cuyo Unigénito, con su vida, muerte y resurrección, nos mereció el premio de la salvación eterna! Os suplicamos nos concedas que, meditando los misterios del santísimo rosario de la bienaventurada Virgen María, imitemos los ejemplos que nos enseñan y alcancemos el premio que prometen. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Monte Nebo


Como dije, durante está visita del Santo Padre a Tierra Santa voy a hacer algún artículo sobre los Santos Lugares que el Papa va a visitar. Comienzo pues por un lugar que el Papa acaba de visitar, a las 09:15 de Ammán y 08:15 de Roma. Este lugar es el Monte Nebo. En cuanto me sea posible, publicaré las palabras que dentro de una oración el Papa ha pronunciado en ese lugar. En dichas palabras el Papa ha destacado que comienza su peregrinación a Tierra Santa en el mismo lugar desde el que se ve toda esta, y que es donde Moisés murió, a las puertas de la Tierra Prometida. También ha destacado como nosotros somos peregrinos, que debemos hacer como Moisés en el Nebo y mirar hacia el fúturo con esperanza. Es de destacar también que hace escasos minutos el Papa ha llegado a Madaba, donde ahora mismo está pronunciando un discurso, y donde va a bendecir la primera piedra de la Universidad de Madaba del Patriarcado Latino de Jerusalén (situada en la misma Madaba). El Papa ha llegado a las 10:30 de Ammán y 09:30 de Roma.

Empiezo pues con el Monte Nebo.

Léemos en el Deuteronomio: "34 1 Moisés subió de las estepas de Moab al monte Nebo, a la cima del Pisgá, frente a Jericó, y el Señor le mostró todo el país: Galaad hasta Dan, 2 todo Neftalí, el territorio de Efraím y Manasés, todo el territorio de Judá hasta el mar Occidental, 3 el Négueb, el Distrito y el valle de Jericó –la Ciudad de las Palmeras– hasta Soar. 4 Y el Señor le dijo: “Esta es la tierra que prometí con juramento a Abraham, a Isaac y a Jacob, cuando les dije: ‘Yo se la daré a tus descendientes’. Te he dejado verla con tus propios ojos, pero tú no entrarás en ella”.
5
Allí murió Moisés, el servidor del Señor, en territorio de Moab, como el Señor lo había dispuesto. 6 Él mismo lo enterró en el Valle, en el país de Moab, frente a Bet Peor, y nadie, hasta el día de hoy, conoce el lugar donde fue enterrado. 7 Cuando murió, Moisés tenía ciento veinte años, pero sus ojos no se habían debilitado, ni había disminuido su vigor. 8 Los israelitas lloraron a Moisés durante treinta días en las estepas de Moab. Así se cumplió el período de llanto y de duelo por la muerte de Moisés."

Como vemos, el Monte Nebo es donde terminó la peregrinación de Moisés por el desierto, donde trás cuarenta años de peregrinaje, Moisés ve la Tierra Prometida y muere sin entrar a ella, y donde, según la tradición fue enterrado. Parece ser que este lugar (incluso por los judíos) fue siempre venerado pero hay que esperar hasta el siglo IV para ver la primera iglesia. Según parece esta estaba dentro de un monasterio, y en sus afueras vivían distintos anacoretas. El lugar estaba decorado con bellos mosaicos, los cuales según parece se salvaron de la barbarie iconoclasta y fueron sacados a la luz en unas excavaciones iniciadas en 1933 por la Custodia Franciscana de Tierra Santa. En esa antigua iglesia (derruida no sabemos cuando) podemos ver mosaicos, dos sacristías y un maravilloso baptisterio (de piscina) adornado con un mosáico alusivo a la caza y al pastoreo.

En la actualidad en el Monte Nebo habita una pequeña comunidad franciscana, que ha levantado un nuevo santuario no muy grande, en el cual se conserva una antigua inscripción en la roca, considerada propiamente como el Memorial de Moisés. Este santuario está rodeado de un muro antiguo. Lo más conocido del lugar es un mirador que hay a un lado, desde el que se ve toda la Tierra Prometida (Judea, Samaría, el Jordán, Belén e incluso en los días más claros Jerusalén). En ese mirador hay una cruz moderna de hierro en la que hay enrrollada una serpiente, lo que nos recuerda el pasaje del Antiguo Testamento en el que Moisés sana al pueblo haciendo que mire a una serpiente que levanta en su cayado. También nos recuerda al pasaje del Nuevo en el que Cristo dice que el debe ser levantado (en la cruz, se entiende) como Moisés levantó la serpiente en el desierto, y así todo el que mire a esa cruz quedará sanado. En su peregrinación jubilar Juan Pablo II habló desde ese mirador, que hoy ha sido visitado por el Santo Padre Benedicto XVI. Según se va del Nebo hacia Madaba existe una fuente, llamada Ayun Musa ("Fuente de Moisés") que según la tradición es la que hizo manar Moisés golpeándola con su cayado.

Es pues este lugar en el que Moisés miró con esperanza la Tierra Prometida el que más debe recordarnos como nosotros debemos mirar siempre hacia adelante, hacia los planes fúturos de Dios. Mirar hacia las promesas de Cristo con verdadera esperanza. Y esto siguiendo el ejemplo de Moisés, modelo de Fé en el Dios Único.

La Custodia Franciscana de Tierra Santa tiene una página web sobre este santuario.

A las 11:30 de Ammán (10:30 de Roma) el Papa visitará el museo Hachemita y después se reunirá allí mismo con los líderes musulmanes. A las 17:30 de Ammán (16:30 de Roma) el Papa rezará las I vísperas del V domingo de Pascua en la catedral greco-melquita de San Jorge (Ammán) con los sacerdotes, religiosos, religiosas, seminaristas y movimientos eclesiales del lugar.

viernes, 8 de mayo de 2009

Novena de Fátima (5)




El día 13 de mayo la Iglesia recuerda litúrgicamente a María Santísima aparecida en Fátima. Estoy publicando durante estos días la novena preparatoria a este día para durante nueve días meditar, en este mes mariano, sobre los anuncios de Fátima, para llegar preparados al 13 de mayo. Ese día tan bello, en que recordamos el mensaje de amor y aviso urgente que María nos dejó en Fátima y que todo el mundo debe conocer.
Tomo la novena de la página web "http://www.devocionario.com/" y pongo aquí la oración correspondiente al quinto día. Sucesivamente iré publicando las de los otros días. En Radio María España se rezará cada día de la novena tras la hora de Sexta (12:10).

OFRECIMIENTO

¡Oh Dios mío! Yo creo, adoro, espero y os amo. Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman.

¡Oh santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo! Yo os adoro profundamente y os ofrezco el preciosísimo cuerpo, sangre, alma y divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes con que El es ofendido; y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón e intercesión del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pecadores.

ORACIÓN PREPARATORIA

Oh santísima Virgen María, Reina del Rosario y Madre de misericordia, que te dignaste manifestar en Fátima la ternura de vuestro Inmaculado Corazón trayéndonos mensajes de salvación y de paz. Confiados en vuestra misericordia maternal y agradecidos a las bondades de vuestro amantísimo Corazón, venimos a vuestras plantas para rendiros el tributo de nuestra veneración y amor. Concédenos las gracias que necesitamos para cumplir fielmente vuestro mensaje de amor, y la que os pedimos en esta Novena, si ha de ser para mayor gloria de Dios, honra vuestra y provecho de nuestras almas. Así sea.

ORACIÓN DE ESTE DÍA (María, Salud de los enfermos)

¡Oh santísima Virgen María, salud de los enfermos y consoladora de los afligidos!, que movida por el ruego de los pastorcitos, obraste ya curaciones en vuestras apariciones en Fátima, y habéis convertido este lugar, santificado por vuestra presencia, en oficina de vuestras misericordias maternales en favor de todos los afligidos. A vuestro Corazón maternal acudimos llenos de filial confianza, mostrando las enfermedades de nuestras almas y las aflicciones y dolencias todas de nuestra vida. Echad sobre ellas una mirada de compasión y remediadlas con la ternura de vuestras manos, para que así podamos serviros y amaros con todo nuestro corazón y con todo nuestro ser.
ORACIÓN FINAL

¡Oh Dios, cuyo Unigénito, con su vida, muerte y resurrección, nos mereció el premio de la salvación eterna! Os suplicamos nos concedas que, meditando los misterios del santísimo rosario de la bienaventurada Virgen María, imitemos los ejemplos que nos enseñan y alcancemos el premio que prometen. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.

El Papa en el centro Regina Pacis de Ammán

Hoy a las 15:30 de Ammán, 14:30 de Roma, el Santo Padre ha visitado el centro Regina Pacis de Ammán. Este centro es regentado por el Patriarcado Latino de Jerusalén y acoge a discapacitados físicos y psíquicos. Al llegar, el Papa ha entrado a la capilla, donde ha sido recibido con cantos. Acto seguído, el Papa ha pronunciado un breve discurso, y después, junto a todos los presentes (entre los que había representantes de otras confesiones cristianas) ha cantado el Padrenuestro en árabe. Después el Papa ha recibido varios regalos, entre ellos un pañuelo scout y un pañuelo típico jordano. Después hemos visto como una religiosa ha llevado en silla de ruedas ha una chica disminuída ha recibir la bendición del Santo Padre. Finalmente, el Papa ha salido entre cantos y aplausos. Es de destacar que la mayoría de las mujeres presentes en el templo, llevaban velo, costumbre muy venerable y que es muy usual en oriente próximo. Pongo aquí el discurso pronunciado por el Papa, traducido por la agencia ZENIT.

(Pulsar aquí para ver vídeo)


Beatitudes,

excelencias,

queridos amigos:

Estoy muy contento de estar aquí, con vosotros, y de saludaros a cada uno de vosotros, así como a los miembros de vuestras familias, allí donde estén. Doy las gracias a Su Beatitud el Patriarca Fouad Twal por las gentiles palabras de saludo y de manera especial deseo destacar la presencia entre nosotros del obispo Selim Sayegh, cuyos proyectos y trabajo para este centro, junto a los de Su Beatitud el patriarca emérito Michel Sabbah, hoy son honrados con la bendición de las ampliaciones que acaban de concluir. Deseo también saludar con gran afecto a los miembros del Comité Central, a las Hermanas Combonianas, y al personal laico comprometido, incluidos aquellos que trabajan en las diferentes áreas y unidades comunitarias del Centro. La estima por vuestra notable competencia profesional, la atención compasiva y la promoción decidida del debido puesto en la sociedad de quienes tienen necesidades especiales son bien conocidas aquí y en todo el reino. Doy las gracias a los jóvenes presentes por su bienvenida conmovedora. Es una gran alegría para mí estar aquí con vosotros.

Como sabéis, mi visita al Centro Nuestra Señora de la Paz, aquí, en Ammán, es la primera etapa de mi peregrinación. Como miles de innumerables miles de peregrinos antes que yo, ahora me toca satisfacer ese profundo deseo de tocar, de encontrar apoyo en los lugares en los que vivió Jesús y que fueron santificados por su presencia, y de venerarlos. Desde los tiempos apostólicos, Jerusalén ha sido el principal lugar de peregrinación para los cristianos, pero antes todavía, en el antiguo Oriente Próximo, los pueblos semitas edificaron lugares sagrados para indicar y conmemorar una presencia o una acción divina. Y la gente común solía acudir a estos centros llevando una parte de los frutos de su tierra y de su ganado para ofrecerlos como acto de homenaje y gratitud.

Queridos amigos: cada uno de nosotros es un peregrino. Todos estamos orientados a avanzar decididamente por el camino de Dios. Naturalmente, después tendemos a volver a atrás la mirada, hacia el recorrido de la vida --en ocasiones con arrepentimientos y recriminaciones, con frecuencia con gratitud y aprecio--, pero de todos modos seguimos adelante, a veces con trepidación y ansia, siempre con expectativa y esperanza, sabiendo que hay otros que nos alientan en el camino. Sé que los viajes que habéis recorrido muchos de vosotros hacia el Centro Reina de la Paz han estado marcados por el sufrimiento y las pruebas. Algunos de vosotros luchan valientemente con formas de invalidez, otros han soportado el rechazo, y algunos de vosotros han sido atraídos por este lugar de paz simplemente para buscar aliento y apoyo. Sé lo importante que es para este centro sensibilizar sobre el puesto que corresponde a los inválidos en la sociedad y asegurar que se ofrezcan los medios adecuados para facilitar su válida integración. ¡Por esta amplitud de miras y determinación, todos vosotros merecéis elogio y aliento!

A veces es difícil encontrar una razón para aquello que se nos presenta sólo como un obstáculo que superar o como una prueba -física o emotiva- que soportar. Pero la fe y la razón nos ayudan a ver un horizonte más allá de nosotros para imaginar la vida como Dios la quiere. El amor incondicional de Dios, que da la vida a cada individuo, tiene un significado y un objetivo para cada vida humana. Su amor salva (Cf. Juan 12,32). Como lo profesan los cristianos, a través de la Cruz, Jesús nos introduce en la vida eterna y de este modo nos indica el camino hacia el futuro, el camino de la esperanza que guía cada paso que damos a través del camino, de manera que también nosotros nos convertimos en difusores de esta esperanza y caridad para los demás.

Amigos, a diferencia de los peregrinos de otra época yo no traigo regalos u ofertas. Vengo sencillamente con una intención y una esperanza: rezar por el precioso regalo de la unidad y de la paz, más concretamente por Oriente Medio. La paz para los individuos, para los padres y los hijos, para las comunidades, paz para Jerusalén, para Tierra Santa, para la región, para toda la familia humana; la paz duradera engendrada por la justicia, la integridad y la compasión, que brota de la humildad, del perdón y del deseo profundo de vivir en armonía como una realidad única

La oración es esperanza en acción. Y, de hecho, la verdadera razón queda contenida en la oración: entramos en contacto amoroso con el único Dios, el creador universal, y de este modo nos damos cuenta de la futilidad de las divisiones y los prejuicios humanos y advertimos las posibilidades maravillosas que se abren ante nosotros cuando nuestros corazones se convierten a la verdad de Dios, a su proyecto para cada uno de nosotros y para nuestro mundo.

Queridos jóvenes amigos: deseo deciros a vosotros, en particular, que al estar entre vosotros siento al fuerza que procede de Dios. Vuestra experiencia del dolor, vuestro testimonio en favor de la compasión, vuestra determinación para superar los obstáculos que encontráis me empujan a creer que los sufrimientos pueden determinar un cambio a mejor. En nuestras pruebas personales y estando al lado de los demás en sus sufrimientos nos hacemos, de alguna forma, más humanos. Y empezamos a aprender que, en otro nivel, también los corazones endurecidos por el cinismo o la injusticia o por la reluctancia a perdonar no están nunca fuera del alcance del radio de acción de Dios y pueden abrirse siempre a un nuevo modo de ser, a una visión de paz.

Os exhorto a todos a rezar cada día por nuestro mundo. Y hoy quiero pediros que asumáis una tarea especifica: rezad, por favor, por mí, cada día de mi peregrinación; por mi renovación espiritual en el Señor y por la conversión de los corazones a la manera de perdonar y de manifestar la solidaridad que es propia de Dios, de manera que mi experiencia, nuestra experiencia, por la unidad y la paz en el mundo traiga abundantes frutos.

Que Dios os bendiga a cada uno de vosotros y a vuestras familias, a los maestros, los enfermeros, los administradores y los bienhechores de este Centro. Que Nuestra Señora Reina de la Paz os proteja y guíe a través de la peregrinación del su Hijo, el Buen Pastor.

[Traducción por Jesús Colina

© Copyright 2009 - Libreria Editrice Vaticana]

Discurso de bienvenida en el aeropuerto de Ammán

En el día de hoy, a las 14:30 de Ammán y 13:3o de Roma, el Santo Padre Benedicto XVI ha llegado al aeropuerto Reina Alia de Ammán, donde ha sido recibido por los reyes de Jordania, Abdalá y Rania. Al llegar, el Papa ha sido recibido por los reyes y por los poderes políticos, diplomáticos y religiosos de Jordania y toda Tierra Santa. El Rey Abdalá ha dirigido al Papa un discurso en el que insistió en la necesaria buena relación entre católicos y musulmanes, y en que el Papa va "bajo el signo de la Fé en el Dios Único". El Santo Padre también ha pronunciado un discurso a los presentes y al mundo entero. Pongo aquí dicho discurso, traducido por la agencia ZENIT.

(Pulsar aquí para ver video)

Majestades,

excelencias,

queridos hermanos obispos,

queridos amigos:



Os saludo con alegría a todos vosotros aquí presentes, mientras inicio mi primera visita a Oriente Medio desde mi elección a la Sede Apostólica, y estoy contento de poner los pies en el suelo del Reino Hachemita de Jordania, una tierra tan rica en historia, patria de tan numerosas civilizaciones antiguas, y profundamente llena de significado religioso para judíos, cristianos y musulmanes. Agradezco a Su Majestad el rey Abdalá II por sus corteses palabras de bienvenida y el dirijo mis particulares felicitaciones en este año que marca el décimo aniversario de su subida al trono. Al saludar a Su Majestad, extiendo de corazón mis mejores augurios a todos los miembros de la Familia real y del Gobierno, y a todo el pueblo del Reino. Saludo a los obispos aquí presentes, especialmente a aquellos con responsabilidades pastorales en Jordania. Me dispongo con alegría a celebrar la liturgia en la Catedral de San Jorge mañana por la noche y en el Estadio Internacional el domingo junto a vosotros, queridos obispos, y con tan numerosos fieles confiados a vuestro cuidado pastoral.

He venido a Jordania como peregrino para venerar los lugares santos que han tenido una tan importante parte en algunos de los acontecimientos clave de la historia bíblica. Sobre el Monte Nebo, Moisés condujo a su gente para echar una mirada a la tierra que se convertiría en su casa, y aquí murió y fue sepultado. En Betania más allá del Jordán, Juan Bautista predicó y dio testimonio de Jesús, a quien él mismo bautizó en las aguas del río que da el nombre a esta tierra. En los próximos días visitaré ambos lugares santos y tendré la alegría de bendecir las primeras piedras de las iglesias que serán construidas sobre el lugar tradicional del Bautismo del Señor. La posibilidad de que la comunidad católica de Jordania pueda edificar lugares públicos de culto es un signo del respeto de este país por la religión y en nombre de los católicos deseo expresar cuánto aprecio esta apertura. La libertad religiosa es ciertamente un derecho humano fundamental y es una ferviente esperanza y oración mías que el respeto de los derechos inalienables y de la dignidad de todo hombre y mujer llegue a ser cada vez más afirmado y difundido, no sólo en Oriente Medio sino en todas partes del mundo.

Mi visita a Jordania me ofrece la grata oportunidad de expresar mi profundo respeto por la comunidad musulmana y de rendir homenaje al papel de quía que lleva a cabo Su Majestad el Rey al promover una mejor comprensión de las virtudes proclamadas por el Islam. Ahora que han pasado algunos años desde la publicación del Mensaje de Ammán y del Mensaje Interreligioso de Amman, podemos decir que estas nobles iniciativas han obtenido buenos resultados al favorecer una alianza de civilizaciones entre el mundo occidental y el musulmán, desmintiendo las predicciones de aquellos que consideran inevitables la violencia y el conflicto. En efecto, el reino de Jordania está desde hace tiempo en primera línea en las iniciativas dirigidas a promover la paz en Oriente Medio y en el mundo, alentando el diálogo interreligioso, apoyando los esfuerzos para encontrar una solución justa al conflicto palestino-israelí, acogiendo los refugiados del vecino Iraq, e intentando frenar el extremismo. No puedo dejar pasar esta oportunidad sin traer a la mente los esfuerzos de vanguardia en favor de la paz en la región hechos por el anterior rey Huseín. Como parece oportuno que mi encuentro de mañana con los líderes religiosos musulmanes, el cuerpo diplomático y los rectores de la Universidad tenga lugar en la mezquita que lleva su nombre. Que su empeño por la solución de los conflictos de la región pueda seguir dando fruto en el esfuerzo por promover una paz duradera y una verdadera justicia para todos aquellos que viven en Oriente Medio.

Queridos amigos, en el Seminario celebrado en Roma el pasado otoño en el Foro Católico-Musulmán, los participantes examinaron el papel central llevado a cabo, en nuestras respectivas tradiciones religiosas, por el mandamiento del amor. Espero vivamente que esta visita y en realidad todas las iniciativas programadas para promover buenas relaciones entre cristianos y musulmanes, puedan ayudar a crecer en el amor hacia el Dios Omnipotente y Misericordioso, como también en el amor fraterno mutuo. Gracias por vuestra acogida. Gracias por vuestra cortesía. ¡Que Dios conceda a sus Majestades felicidad y larga vida! ¡Que Él bendiga a Jordania con la prosperidad y la paz!

[Traducción por Inma Álvarez

© Copyright 2009 - Libreria Editrice Vaticana]


Respuestas del Papa a los periodistas en el avión


Publico aquí la transcripción íntegra de la entevista que el Santo Padre ha concedido a los periodistas en el avión mientras viajaba hacia Ammán. La traducción del original está hecha por la agencia ZENIT. Sígamos todos con atención este viaje histórico, peregrinemos todos con el Papa a la Tierra Santa.

--Padre Lombardi: Santidad, le agradecemos mucho que nos dé también esta vez una ocasión de un encuentro con usted al inicio de un viaje tan importante y comprometido. Entre otras cosas, nos da también la oportunidad de augurarle un buen viaje y de decirle que colaboraremos en difundir los mensajes que usted intentará darnos. Como es habitual, las preguntas que ahora planteo son el resultado de una recogida de preguntas entre los colegas aquí presentes. Las planteo yo por motivos de facilidad logística, pero en realidad son fruto del trabajo común.

--Pregunta: Santidad, este viaje sucede en un periodo muy delicado para Oriente Medio: hay fuertes tensiones -con ocasión de la crisis de Gaza, se había incluso pensado en que usted renunciaría a realizarlo. Al mismo tiempo, pocos días después de su viaje, los principales responsables políticos de Israel y de la Autoridad palestina se encontrarán con el presidente Obama. ¿Piensa usted que podrá dar una contribución al proceso de paz que ahora parece encallado?

--Benedicto XVI: ¡Buenos días! Quisiera ante todo agradeceros el trabajo que hacéis y desearnos a todos un buen viaje, una buena peregrinación, un buen retorno. Respecto a la pregunta, ciertamente intento contribuir a la paz no como individuo, sino en nombre de la Iglesia católica, de la Santa Sede. Nosotros no somos un poder político, sino una fuerza espiritual y esta fuerza espiritual es una realidad que puede contribuir al progreso del proceso de paz. Veo tres niveles: como creyentes, estamos convencidos de que la oración es una verdadera fuerza. Abre el mundo a Dios: estamos convencidos de que Dios escucha y de que puede actuar en la historia. Pienso que si millones de personas, de creyentes, rezan, es realmente una fuerza que influye y puede contribuir a ir adelante con la paz. Segundo punto: intentamos ayudar en la formación de las conciencias. La conciencia es la capacidad del hombre de percibir la verdad, pero esta capacidad está a menudo obstaculizada por intereses particulares. Y liberar de estos intereses, abrir más a la verdad, a los verdaderos valores es una gran tarea: es un deber de la Iglesia ayudar a conocer los verdaderos criterios, los verdaderos valores, y liberarnos de intereses particulares. Y así, tercer punto, interpelamos también -¡precisamente es así!- a la razón: precisamente porque no somos parte política, podemos quizás más fácilmente, también a la luz de la fe, ver los verdaderos criterios, ayudar a entender lo que contribuye a la paz y hablar a la razón, apoyar las posturas realmente razonables. Y esto lo hemos hecho ya y queremos hacerlo ahora y en el futuro.

--Gracias, Santidad, segunda pregunta. Usted, como teólogo, ha reflexionado en particular sobre la raíz única que une a cristianos y judíos. ¿Cómo es posible que, a pesar de los esfuerzos de diálogo, se produzcan a menudo ocasiones de malentendidos? ¿Cómo ve el futuro del diálogo entre las dos comunidades?

--Benedicto XVI: Lo importante es que en realidad tenemos la misma raíz, los mismos Libros del Antiguo Testamento que son -tanto para los judíos como para nosotros- Libro de la Revelación. Pero naturalmente, tras dos mil años de historias distintas, es más, separadas, no hay que sorprenderse por el hecho de que se den malentedidos, porque se han formado tradiciones de interpretación, de lenguaje, de pensamiento muy distintas, por así decirlo, un "cosmos semántico" muy distinto, de modo que las mismas palabras en ambas partes significan cosas distintas; y con este uso de palabras que, en el curso de la historia han conformado significados diversos, nacen obviamente malentendidos. Debemos hacer de todo para aprender uno el lenguaje del otro, y me parece que hacemos grandes progresos. Hoy tenemos la posibilidad de que los jóvenes, los futuros profesores de teología, puedan estudiar en Jerusalén, en la Universidad hebrea, y los judíos tienen contacto académico con nosotros: así se da un encuentro de estos "cosmos semánticos" distintos. Aprendemos mutuamente y avanzamos por el camino del verdadero diálogo, aprendemos uno del otro y estoy seguro y convencido de que hacemos progresos. Y esto ayudará también a la paz, es más, al amor recíproco.

--Santidad, este viaje tiene dos dimensiones esenciales de diálogo interreligioso, con el islam y con el judaísmo. ¿Son dos direcciones completamente separadas entre ellas, o habrá también un mensaje común que tenga que ver con las tres religiones que hacen referencia a Abraham?

--Benedicto XVI: Ciertamente existe también un mensaje común y será ocasión de presentarlo y, a pesar de la diferencia de orígenes, tenemos raíces comunes, porque, como ya he dicho, el cristianismo nace del Antiguo Testamento y la escritura del Nuevo Testamento sin el Antiguo no existiría, porque se refiere permanentemente a la Escritura, es decir, al Antiguo Testamento; pero también el Islam ha nacido en un ambiente donde estaba presente tanto el judaísmo como las diversas ramas del cristianismo, judeo-cristianismo, cristianismo-antioqueno bizantino, y todas estas circunstancias se reflejan en la tradición coránica. De modo que tenemos mucho en común desde los orígenes, en la fe en el único Dios. Por ello es importante por una parte mantener un diálogo a dos partes -con los judíos y con el Islam - y luego también un diálogo trilateral. Yo mismo he sido cofundador de una fundación para el diálogo entre las tres religiones donde personalidades como el metropolita Damaskinos y el gran rabino de Francia René Samuel Sirat, etc. estaban juntos, y esta fundación hizo también una edición de los libros de las tres religiones: el Corán, el Nuevo Testamento y el Antiguo Testamento. Por tanto el diálogo trilateral debe seguir adelante, es importantísimo para la paz y también -digamos- para vivir bien la propia religión.

--Una última pregunta. Santidad, usted ha aludido a menudo al problema de la disminución de los cristianos en Oriente Medio y también en particular en Tierra Santa. Es un fenómeno con diferentes razones de carácter político, económico y social. ¿Qué se puede hacer concretamente para ayudar a la presencia cristiana en la región. ¿Qué contribución espera dar con su viaje? ¿Hay esperanza para estos cristianos en el futuro? ¿Tendrá un mensaje particular también para los cristianos de Gaza que vendrán a encontrarle en Belén?

--Benedicto XVI: Ciertamente hay esperanzas, porque ahora es un momento, como usted ha dicho, difícil, pero también un momento de esperanza, de un nuevo comienzo, de un nuevo impulso en el camino hacia la paz y queremos alentar a los cristianos en Tierra Santa y en todo el Oriente Medio a quedarse, a dar su contribución en los países de sus orígenes: son un componente importante de la vida de estas regiones. En concreto la Iglesia, además de palabras de aliento, a la oración común, tiene además escuelas y hospitales. En este sentido tenemos la presencia de realidades muy concretas. Nuestras escuelas forman a una generación que tendrá la posibilidad de estar presente en la vida pública. Estamos creando la Universidad católica en Jordania, me parece ésta una grande perspectiva donde los jóvenes -tanto musulmanes como cristianos- se encuentran, aprenden juntos, donde se forma una élite cristiana que está preparada precisamente para trabajar por la paz. Pero generalmente nuestras escuelas son una oportunidad muy importante para abrir un futuro a los cristianos y los hospitales muestran nuestra presencia. Además hay muchas asociaciones cristianas que ayudan de diversos modos a los cristianos y con ayudas concretas les animan a que se queden, así espero que realmente los cristianos puedan encontrar el valor, la humildad, la paciencia de quedarse en estos países, de ofrecerles su contribución al futuro de estos países.

--Padre Lombardi: Gracias, Santidad, con estas respuestas nos ha ayudado a ambientar nuestro viaje desde un punto de vista espiritual, desde un punto de vista cultural, y renuevo los augurios, también de parte de todos los colegas que están en este vuelo, y también de otros que están volando hacia Tierra Santa en estos momentos, precisamente para participar y ayudar también desde un punto de vista informativo al buen resultado de esta misión suya tan comprometida. Buen viaje a usted y a todos sus colaboradores y buen trabajo también a los colegas.

[Transcripción de Radio Vaticano, traducción de Inma Álvarez]


jueves, 7 de mayo de 2009

Novena de Fátima (4)

El día 13 de mayo la Iglesia recuerda litúrgicamente a María Santísima aparecida en Fátima. Estoy publicando durante estos días la novena preparatoria a este día para durante nueve días meditar, en este mes mariano, sobre los anuncios de Fátima, para llegar preparados al 13 de mayo. Ese día tan bello, en que recordamos el mensaje de amor y aviso urgente que María nos dejó en Fátima y que todo el mundo debe conocer. Tomo la novena de la página Alineación al centroweb "http://www.devocionario.com/" y pongo aquí la oración correspondiente al cuarto día. Sucesivamente iré publicando las de los otros días. En Radio María España se rezará cada día de la novena tras la hora de Sexta (12:10).

OFRECIMIENTO

¡Oh Dios mío! Yo creo, adoro, espero y os amo. Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman.

¡Oh santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo! Yo os adoro profundamente y os ofrezco el preciosísimo cuerpo, sangre, alma y divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes con que El es ofendido; y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón e intercesión del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pecadores.

ORACIÓN PREPARATORIA

Oh santísima Virgen María, Reina del Rosario y Madre de misericordia, que te dignaste manifestar en Fátima la ternura de vuestro Inmaculado Corazón trayéndonos mensajes de salvación y de paz. Confiados en vuestra misericordia maternal y agradecidos a las bondades de vuestro amantísimo Corazón, venimos a vuestras plantas para rendiros el tributo de nuestra veneración y amor. Concédenos las gracias que necesitamos para cumplir fielmente vuestro mensaje de amor, y la que os pedimos en esta Novena, si ha de ser para mayor gloria de Dios, honra vuestra y provecho de nuestras almas. Así sea.

ORACIÓN DE ESTE DÍA (Amor a la Iglesia)

¡Oh santísima Virgen María, Reina de la Iglesia!, que exhortaste a los pastorcitos de Fátima a rogar por el Papa, e infundiste en sus almas sencillas una gran veneración y amor hacia él, como Vicario de vuestro Hijo y su representante en la tierra. Infunde también a nosotros el espíritu de veneración y docilidad hacia la autoridad del Romano Pontífice, de adhesión inquebrantable a sus enseñanzas, y en él y con él un gran amor y respeto a todos los ministros de la santa Iglesia, por medio de los cuales participamos la vida de la gracia en los sacramentos.
ORACIÓN FINAL

¡Oh Dios, cuyo Unigénito, con su vida, muerte y resurrección, nos mereció el premio de la salvación eterna! Os suplicamos nos concedas que, meditando los misterios del santísimo rosario de la bienaventurada Virgen María, imitemos los ejemplos que nos enseñan y alcancemos el premio que prometen. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.


Viaje de Benedicto XVI a Tierra Santa

Como ya sabrán mañana día 8 el Santo Padre comienza su primer viaje a Tierra Santa desde que fue elevado a la Catedra de Pedro. Este pasado domingo, en el rezo del Regina Caeli, el Papa nos invitó a rezar por el éxito de este viaje y afirmó que va a esas tierras como "peregrino de paz".

Efectivamente, el Papa irá como peregrino, es decir, como visitante en y por la Fé en Cristo Resucitado. Y efectivamente también, el Papa llevará la paz. Mejor dicho, la Paz, con mayúscula. Porque Cristo ES la Paz verdadera y el nos da esa Paz, pero no como la da el mundo, sino en verdad, en el sentido último de paz, que no es sino reposo del alma en Dios y tranquilidad del alma en las promesas del Santo Evangélio. Oremos pues por este viaje y oremos también para que se valoren los 29 mensajes que el Papa dirigirá al mundo desde ese lugar donde están las raíces de nuestra Fé, y para que los medios no se dediquen únicamente a sacar de contexto algúna frase de su maravilloso magisterio. Desde luego, el Papa no se achantará por el mundo y por los que se quejen de él, y dirá lo que tiene que decir, lo que es verdad y está con la Verdad, aunque no sea lo (actualmente) políticamente correcto (y es que lo políticamente correcto cambia de dirección como una veleta con los años y los tiempos).

Pues bien, durante este viaje en este blog haré una pequeña programación especial, para que yo y todo aquel que tenga a bien pasar por aquí sigamos los pasos y las palabras de nuestro Santo Padre.

Esta programación especial consistirá en:

1-Publicar aquí todas las noticias que se vayan publicando entorno a este viaje y alguna opinión.

2-Ir publicando los diferentes mensajes que el Santo Padre vaya dirigiendo al mundo desde allí.

3-También tengo pensado hacer artículos sobre los diferentes lugares santos que el Papa vaya visitando, con fotos e información abundante de los mismos. Así podremos seguír al Papa todavía más plenamente y poner en su más amplio contexto todo lo que diga. (Esto se lo podrían aplicar algunos medios de comunicación).

Por otra parte, quiero decir que Radio María España radiará todos los discursos del Papa y hará un seguimiento especial del viaje, con algún programa especial. Será esta misma radio la que coordinará estas transmisiones para todas las Radios María de lengua castellana. Os ínvitamos a entrar aquí y leer la programación especial. Hay que tener en cuenta que todos los horarios son los de Madrid (+2UTC).

Por último, publico el programa del viaje, que está colgado en la sección especial sobre este viaje de la página de la Santa Sede. En esa misma página podrán leer el misal para el viaje apostólico. En este programa está indicado en qué actos el Papa dirigirá al mundo su maravilloso magisterio. Lean todo el programa y vean que amplitud tiene este maravilloso viaje, como el Papa quiere mostrarse como padre de todos.

Les ínvitamos pues a seguír este viaje, y a seguírlo con este blog.

ITALIA

Viernes 8 de mayo de 2009

Roma

09.30 Salida del aeropuerto internacional Leonardo da Vinci de Fiumicino (Roma) hacia el aeropuerto internacional Reina Alia de Ammán (Jordania)

TIERRA SANTA

Ammán

14.30 Ceremonia de Bienvenida en el aeropuerto internacional Reina Alia de Ammán Discurso del Santo Padre
15.30 Visita al Centro "Regina Pacis" de Ammán Discurso del Santo Padre
17.40 Visita de cortesía a sus majestades el rey y la reina de Jordania en el palacio real Al-Husseinye de Ammán

Sábado 9 de mayo de 2009

07.15 Santa Misa en privado en la capilla de la Nunciatura Apostólica de Ammán

Monte Nebo

09.15 Visita a la antigua Basílica del Memorial de Moisés en el Monte Nebo Discurso del Santo Padre

Madaba

10.30 Bendición de la primera piedra de la Universidad de Madaba del Patriarcado latino Discurso del Santo Padre

Ammán

11.30 Visita al museo Hachemita y a la mezquita Al-Hussein Bin Talal de Ammán
11.45 Encuentro con los líderes religiosos musulmanes, el Cuerpo diplomático y los rectores de las universidades de Jordania en el patio exterior de la mezquita Al-Hussein Bin Talal de Ammán Discurso del Santo Padre
17.30 Celebración de las Vísperas con los sacerdotes, religiosos, religiosas, seminaristas y movimientos eclesiales en la catedral greco-melquita de San Jorge, Ammán Discurso del Santo Padre

Domingo 10 de mayo de 2009

10.00 Santa Misa en el Estadio Internacional de Ammán Homilía del Santo Padre
Rezo del Regina Cæli en el Estadio Internacional de Ammán Palabras del Santo Padre
12.45 Comida con los patriarcas, los obispos y el séquito papal en el Vicariato Latino de Ammán

Bethany beyond the Jordan

17.30 Visita a Betania junto al río Jordán - Lugar del Bautismo de Cristo
18.00 Bendición de las primeras piedras de las iglesias de los latinos y de los greco-melquitas en Betania junto al río Jordán Discurso del Santo Padre

Lunes 11 de mayo de 2009

Ammán

07.30 Santa Misa en privado en la capilla de la Nunciatura Apostólica de Ammán
10.00 Ceremonia de despedida en el aeropuerto internacional Reina Alia de Ammán Discurso del Santo Padre
10.30 Salida en avión desde el aeropuerto internacional Reina Alia de Ammán (Jordania) hacia el aeropuerto internacional Ben Gurion de Tel Aviv (Israel)

Tel Aviv

11.00 Ceremonia de bienvenida en el aeropuerto internacional Ben Gurion de Tel Aviv Discurso del Santo Padre

Jerusalén

16.15 Visita de cortesía al Presidente del Estado de Israel en el palacio presidencial de Jerusalén Discurso del Santo Padre
17.45 Visita al Memorial de Yad Vashem de Jerusalén Discurso del Santo Padre
18.45 Encuentro con las organizaciones para el diálogo interreligioso en el Auditorio del Notre Dame of Jerusalem Center Discurso del Santo Padre

Martes 12 de mayo de 2009

09.00 Visita a la cúpula de la Roca en la explanada de las mezquitas de Jerusalén
Visita de cortesía al Gran Mufti en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén Discurso del Santo Padre
10.00 Visita al Muro occidental de Jerusalén
10.45 Visita de cortesía a los dos Grandes Rabinos de Jerusalén en el Centro Hechal Shlomo de Jerusalén Discurso del Santo Padre
11.50 Rezo del Regina Coeli con los Ordinarios de Tierra Santa en el Cenáculo de Jerusalén Discurso del Santo Padre
12.30 Breve visita a la concatedral de los latinos en Jerusalén
13.00 Comida con los Ordinarios de Tierra Santa, los abades y el séquito papal en el Patriarcado de los latinos di Jerusalén
16.30 Santa Misa en el Valle de Josafat de Jerusalén Homilía del Santo Padre

Miércoles 13 de mayo de 2009

Belén

09.00 Ceremonia de bienvenida en la plaza situada frente al palacio presidencial de Belén Discurso del Santo Padre
10.00 Santa Misa en la plaza del Pesebre de Belén Homilía del Santo Padre
12.30 Comida con los Ordinarios de Tierra Santa, la comunidad de los franciscanos y el séquito papal en la Casa Nova del convento de Belén
15.30 Visita privada a la Gruta de la Natividad de Belén
16.10 Visita al hospital Cáritas Baby de Belén
16.45 Visita al Campo de refugiados Aida, en Belén Discurso del Santo Padre
18.00 Visita de cortesía al Presidente de la Autoridad Nacional Palestina en el palacio presidencial de Belén
18.40 Ceremonia de despedida en el patio del palacio presidencial Discurso del Santo Padre

Jueves 14 de mayo de 2009

Nazaret

10.00 Santa Misa en el Monte del Precipicio, Nazaret Homilía del Santo Padre
12.30 Comida con los Ordinarios locales, la comunidad de los franciscanos y el séquito papal en el convento de los franciscanos de Nazaret
15.50 Encuentro con el Primer Ministro israelí en el convento de los franciscanos de Nazaret
16.30 Saludo a los líderes religiosos de Galilea en el Auditorio del Santuario de la Anunciación de Nazaret Discurso del Santo Padre
17.00 Visita a la Gruta de la Anunciación de Nazaret
17.30 Celebración de las Vísperas con los Obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas, movimientos eclesiales y agentes de pastoral de Galilea en la Basílica superior de la Anunciación de Nazaret Discurso del Santo Padre

Viernes 15 de mayo de 2009

Jerusalén

07.30 Santa Misa en privado en la capilla de la Delegación Apostólica de Jerusalén
09.15 Encuentro ecuménico en el Sala del Trono de la Sede del Patriarcado greco-ortodoxo de Jerusalén Discurso del Santo Padre
10.15 Visita al Santo Sepulcro de Jerusalén Discurso del Santo Padre
11.10 Visita a la iglesia patriarcal armenio-apostólica de Santiago de Jerusalén Discurso del Santo Padre

Tel Aviv

13.30 Ceremonia de despedida en el aeropuerto internacional Ben Gurion de Tel Aviv Discurso del Santo Padre
14.00 Salida del aeropuerto internacional Ben Gurion de Tel Aviv (Israel) hacia el aeropuerto de Ciampino (Roma)

I T A L I A

Roma

16.50 Llegada al aeropuerto de Ciampino

Uso horario:

Roma: + 2 UTC

Jordania, Israel y Territorios Nacionales Palestinos: + 3 UTC

ITTE MISSA EST

El Papa presenta a San Juan Damasceno


Siguiendo mi política de llevar a todos el maravilloso magisterio del Santo Padre Benedicto XVI pongo aquí ahora la catequesis que impartió este último miércoles en Roma. Continuando con su serie de catequesis sobre los más destacados personajes de la Iglesia en sus primeros tiempos, el Papa presentó este miércoles a San Juan Damasceno.

"Queridos hermanos y hermanas:

quisiera hablar hoy de Juan Damasceno, un personaje de primera categoría en la historia de la teología bizantina, un gran doctor en la historia de la Iglesia universal. Es sobre todo un testigo ocular del paso de la cultura griega y siriaca, compartida en la parte oriental del Imperio bizantino, a la cultura del Islam, que se hizo espacio con sus conquistas militares en el territorio reconocido habitualmente como Medio o Próximo Oriente. Juan, nacido en una rica familia cristiana, aún joven asumió el cargo -quizás ostentado también por su padre- de responsable económico del califato. Bien pronto, sin embargo, insatisfecho de la vida de la corte, maduró la elección monástica, entrando en el monasterio de San Sabas, cerca de Jerusalén. Era alrededor del año 700. No alejándose nunca del monasterio, se dedicó con todas sus fuerzas a la ascesis y a la actividad literaria, sin desdeñar una cierta actividad pastoral, de la que dan testimonio sobre todo sus numerosas Homilías. Su memoria litúrgica se celebra el 4 de diciembre. El papa León XIII lo proclamó Doctor de la Iglesia universal en 1890.

De él se recuerdan en Oriente sobre todo los tres Discursos contra quienes calumnian las imágenes santas, que fueron condenados, tras su muerte, por el Concilio iconoclasta de Hieria (754). Estos discursos, sin embargo, fueron el motivo principal de su rehabilitación y canonización por parte de los Padres ortodoxos convocados en el II Concilio de Nicea (787), séptimo ecuménico. En estos textos es posible encontrar los primeros intentos teológicos importantes de legitimación de la veneración de las imágenes sagradas, uniendo a éstas al misterio de la Encarnación del Hijo de Dios en el seno de la Virgen María.

Juan Damasceno fue también uno de los primeros en distinguir entre el culto público y privado de los cristianos, entre la adoración (latreia) y la veneración (proskynesis): la primera sólo puede dirigirse a Dios, sumamente espiritual, la segunda en cambio puede utilizar una imagen para dirigirse a aquel que es representado por ella. Obviamente, el Santo no puede en ningún caso ser identificado con la materia de la que está compuesto el icono. Esta distinción se reveló en seguida muy importante para responder de modo cristiano a aquellos que pretendían como universal y perenne la observancia de la severa prohibición del Antiguo Testamento sobre la utilización cultual de las imágenes. Esta era la gran discusión también en el mundo islámico, que acepta esta tradición hebrea de la exclusión total de las imágenes en el culto. En cambio los cristianos, en este contexto, han discutido el problema y encontrado la justificación para la veneración de las imágenes. Damasceno escribía: "En otros tiempos Dios no había sido representado nunca en imagen, siendo incorpóreo y sin rostro. Pero dado que ahora Dios ha sido visto en la carne y ha vivido entre los hombres, yo represento lo que es visible en Dios. Yo no venero la materia, sino al creador de la materia, que se ha hecho materia por mí y se ha dignado habitar en la materia y obrar mi salvación a través de la materia. Nunca cesaré por ello de venerar la materia a través de la cual me ha llegado la salvación. ¡Pero no la venero en absoluto como Dios! ¿Cómo podría ser Dios aquello que ha recibido la existencia a partir del no ser?... Sino que yo venero y respeto también todo el resto de la materia que me ha procurado la salvación, en cuanto que está llena de energías y de gracias santas. ¿No es quizás materia el madero de la cruz tres veces bendita?... ¿Y la tinta y el libro santísimo de los Evangelios no son materia? ¿El altar salvífico que nos dispensa el pan de vida no es materia?... Y antes que nada, ¿no son materia la carne y la sangre de mi Señor? O se debe suprimir el carácter sagrado de todo esto, o se debe conceder a la tradición de la Iglesia la veneración de las imágenes de Dios y la de los amigos de Dios que son santificados por el nombre que llevan, y que por esta razón están habitados por la gracia del Espíritu Santo. No se ofenda por tanto a la materia: ésta no es despreciable, porque nada de lo que Dios ha hecho es despreciable" (Contra imaginum calumniatores, I, 16, ed. Kotter, pp. 89-90). Vemos que, a causa de la encarnación, la materia aparece como divinizada, es vista como morada de Dios. Se trata de una nueva visión del mundo y de las realidades materiales. Dios se ha hecho carne y la carne se ha convertido realmente en morada de Dios, cuya gloria resplandece en el rostro humano de Cristo. Por tanto, las invitaciones del Doctor oriental son aún hoy de extrema actualidad, considerando la grandísima dignidad que la materia ha recibido en la Encarnación, pudiendo llegar a ser, en la fe, signo y sacramento eficaz del encuentro del hombre con Dios. Juan Damasceno es, por tanto, un testigo privilegiado del culto de los iconos, que llegará a ser uno de los aspectos más distintivos de la teología y de la espiritualidad oriental hasta hoy. Y sin embargo es una forma de culto que pertenece simplemente a la fe cristiana, a la fe en ese Dios que se ha hecho carne y que se ha hecho visible. La enseñanza de san Juan Damasceno se inserta así en la tradición de la Iglesia universal, cuya doctrina sacramental prevé que elementos materiales tomados de la naturaleza puedan convertirse a través de la gracia en virtud de la invocación (epiclesis) del Espíritu Santo, acompañada por la confesión de la fe verdadera.

En unión con estas ideas de fondo Juan Damasceno pone también la veneración de las reliquias de los santos, sobre la base de la convicción de que los santos cristianos, habiendo sido hechos partícipes de la resurrección de Cristo, no pueden ser considerados simplemente como 'muertos'. Enumerando, por ejemplo, aquellos cuyas reliquias o imágenes son dignas de veneración, Juan precisa en su tercer discurso en defensa de las imágenes: "Ante todo (veneramos) a aquellos entre quienes Dios ha descansado, él único santo que mora entre los santos (cfr Is 57,15), como la santa Madre de Dios y todos los santos. Estos son aquellos que, en cuanto es posible, se han hecho semejantes a Dios con su voluntad y por la inhabitación y la ayuda de Dios, son llamados realmente dioses (cfr Sal 82,6), no por naturaleza, sino por contingencia, así como el hierro al rojo es llamado fuego, no por naturaleza sino por sontingencia y por participación del fuego. Dice de hecho: Seréis santos porque yo soy santo" (Lv 19,2)" (III, 33, col. 1352 A). Tras una serie de referencias de este tipo, Damasceno podía deducir serenamente, por tanto: "Dios, que es bueno y superior a toda bondad, no se contentó con la contemplación de sí mismo, sino que quiso que hubiera seres beneficiados por él que pudieran llegar a ser partícipes de su bondad: por ello creó de la nada todas las cosas, visibles e invisibles, incluido el hombre, realidad visible e invisible. Y lo creó pensando y realizándolo como un ser capaz de pensamiento (ennoema ergon) enriquecido por la palabra (logo[i] sympleroumenon) y orientado hacia el espíritu (pneumati teleioumenon)" (II, 2, PG 94, col. 865A). Y para aclarar ulteriormente este pensamiento, añade: "Es necesario dejarse llenar de estupor (thaumazein) por todas las obras de la providencia (tes pronoias erga), alabarlas todas y aceptarlas todas, superando la tentación de señalar en ellas aspectos que a muchos parecen injustos o inicuos (adika), y admitiendo en cambio que el proyecto de Dios (pronoia) va más allá de la capacidad cognoscitiva y comprensiva (agnoston kai akatalepton) del hombre, mientras que al contrario sólo Él conoce nuestros pensamientos, nuestras acciones e incluso nuestro futuro" (II, 29, PG 94, col. 964C). Ya Platón, por otro lado, decía que toda filosofía comienza con el estupor: también nuestra fe comienza con el estupor de la creación, de la belleza de Dios que se hace visible.

El optimismo de la contemplación natural (physikè theoria), de este ver en la creación visible lo bueno, lo bello y lo verdadero, este optimismo cristiano no es un optimismo ingenuo: tiene en cuenta la herida infligida a la naturaleza humana por una libertad de elección querida por Dios y utilizada inapropiadamente por el hombre, con todas las consecuencias de desarmonía difundida que han derivado de ella. De ahí la exigencia, percibida claramente por el teólogo de Damasco, de que la naturaleza en la que se refleja la bondad y la belleza de Dios, herida por nuestra culpa, "fuese reforzada y renovada" por el descendimiento del Hijo de Dios en la carne, después de que de muchas formas y en diversas ocasiones Dios mismo hubiera intentado demostrar que había creado al hombre para que estuviera no solo en el "ser", sino en el "ser bien" (cfr La fede ortodossa, II, 1, PG 94, col. 981°). Con arrebato apasionado Juan explica: "Era necesario que la naturaleza fuese reforzada y renovada y fuese indicada y enseñada concretamente la vía de la virtud (didachthenai aretes hodòn), que aleja de la corrupción y conduce a la vida eterna... Apareció así en el horizonte de la historia en gran mar del amor de Dios por el hombre (philanthropias pelagos)..." Es una bella expresión. Vemos, por una parte, la belleza de la creación y por otra, la destrucción causada por la culpa humana. Pero vemos en el Hijo de Dios, que desciende para renovar la naturaleza, el mar del amor de Dios por el hombre. Continua Juan Damasceno: "Él mismo, el Creador y el Señor, luchó por su criatura trasmitiéndole con su ejemplo su enseñanza... Y así el Hijo de Dios, aún subsistiendo en la forma de Dios, descendió los cielos y bajó... hacia sus siervos.... realizando la cosa más nueva de todas, la única cosa verdaderamente nueva bajo el sol, a través de la cual se manifestó de hecho la infinita potencia de Dios" (III, 1. PG 94, col. 981C-984B).

Podemos imaginar el consuelo y la alegría que difundían en el corazón de los fieles estas palabras ricas de imágenes tan fascinantes. Las escuchamos también nosotros, hoy, compartiendo los mismos sentimientos de los cristianos de entonces: Dios quiere descansar en nosotros, quiere renovar la naturaleza también a través de nuestra conversión, quiere hacernos partícipes de su divinidad. Que el Señor nos ayude a hacer estas palabras sustancia de nuestra vida.

(En castellano)

Queridos hermanos y hermanas:

San Juan Damasceno, figura importante en la teología bizantina, fue, sobre todo, testigo ocular del tránsito de la cultura cristiana griega y siria, característica de la parte oriental del Imperio bizantino, al mundo islámico, que se abría paso a través de conquistas militares en el territorio que hoy se conoce como Medio y Cercano Oriente. San Juan Damasceno nació en una rica familia cristiana y, siendo joven, se ocupó de las finanzas del califato. No satisfecho de ese tipo de vida, en torno al año setecientos, ingresó en el monasterio de San Saba, cerca de Jerusalén. Allí se dedicó con todas sus fuerzas a la ascesis y a la literatura, así como a la actividad pastoral, como se puede ver por las numerosas homilías que conservamos de él. El Papa León Trece lo proclamó doctor de la Iglesia universal en mil ochocientos noventa. San Juan Damasceno es recordado, entre otras cosas, por sus tres discursos contra los que calumnian las santas imágenes, en los que aparecen los primeros intentos de legitimar la veneración de las imágenes sagradas, vinculándolas con el misterio de la encarnación del Hijo de Dios en el seno de la Virgen María. Insistió también en su magisterio en la veneración de las reliquias de los santos.

Saludo con afecto a los peregrinos de lengua española, en particular a los participantes en el vigésimo segundo curso de actualización sacerdotal organizado por el Pontificio Colegio Español de San José de Roma, así como a los demás grupos procedentes de España, México, Ecuador, Argentina y otros países latinoamericanos. Que, animados por la intercesión y la presencia alentadora de los santos, demos testimonio del Evangelio de palabra y con la propia vida. Muchas gracias."


[Traducción del original italiano por Inma Álvarez

© Copyright 2009 - Libreria Editrice Vaticana]

Oigamos a África

En uno de los comentarios que he publicado recientemente sobre las palabras del Santo Padre sobre el SIDA y sobre la pretensión de ICV para reprobarle oficialmente por ello decía que estos señores que se quejan de lo que dice el Papa están tranquilamente en su casa y muy seguros y alejados del SIDA. No es a ellos a los que hay que oír, sino a la Iglesia, que es la que más enfermos de SIDA atiende, y, más todavía, a los africanos. Oigamos pues a los africanos.

"ROMA, miércoles, 6 de mayo de 2009 (ZENIT.org).- "Decimos con firmeza nuestro 'no' a este modelo cultural totalmente extraño a nuestros valores y tradiciones, que nos está siendo impuesto como determinante de la mejora de nuestra vida".

Con estas palabras un grupo de estudiantes del Camerún ha hecho pública en Europa una carta abierta, recibida por Zenit, contra los ataques al Papa por sus palabras sobre el preservativo, durante el viaje apostólico a Camerún y Angola el pasado mes de marzo.

En ella, se exige al Director ejecutivo del Fondo Mundial para la lucha contra el Sida, a los diputados belgas y a los ministros de Sanidad español, alemán y de Exteriores francés, que "pidan perdón al Papa y a los africanos".

Este grupo denuncia que la prensa occidental ha "instrumentalizado injustamente, en una violenta campaña sabiamente orquestada" las palabras del Papa, y que los ataques recibidos por éste constituyen "una vergonzosa injerencia en la realidad africana".

Los firmantes afirman que los autores de las críticas "han identificado al continente africano como uno de los principales mercados de llegada de los preservativos para hacer crecer sus economías nacionales. El juego está claro: las industrias del preservativo están en Occidente".

"El Santo Padre ha tocado el nudo del problema, alarmando a los agentes de este floreciente negocio en África", acusan.

Para estos estudiantes, se ha utilizado al Papa como "chivo expiatorio" para "defender sus intereses económicos ocultos tras la exportación masiva de preservativos a África y sus mecanismos de exportación de sus prácticas anticonceptivas a países con fuerte crecimiento demográfico".

"Que promuevan y defiendan el uso del condón en su casa, ya que esta elección corresponde a sus concepciones antropológicas sobre el ser humano, pero no tienen derecho a imponer sus elecciones a los africanos", añaden.

Especialmente, exigen a Occidente que "pida perdón a los africanos" por "burlarse de los africanos presentándose como los verdaderos benefactores, cuando en realidad no lo son".

"¿De qué sirve proteger a los africanos con el preservativo si después se les mata con tantos mecanismos de explotación o con las armas por la guerra de intereses políticos y económicos de esos mismos benefactores?".

La gente en África "no muere solo de Sida, así que es mentira decir que el preservativo salve vidas humanas", añaden.

"Pedimos por tanto a estos presuntos benefactores de África que dejen de una vez de especular con ella. Es necesario invertir la tendencia: la pobreza de África no debe hacer más la riqueza de los países ya desarrollados".

Por último, los firmantes exigen al Fondo para la lucha contra el Sida que destine los fondos con los que cuenta "al envío masivo de recursos para excavar pozos de agua y para construir implantes fotovoltaicos para la producción de energía solar, con lo que se favorezca una distribución masiva de agua y luz".

"Éstos son los bienes esenciales y decisivos para África, y todos los agentes de la cooperación internaiconal al desarrollo son muy conscientes de ello. Ésta es la ayuda humanitaria que África necesita para desarrollarse, y no el preservativo", concluyen.

Más información en: studentidelcamerun@yahoo.fr

miércoles, 6 de mayo de 2009

Discurso del Papa 4 de mayo de 2009

Publico el discurso que el pasado lunes día 4 dirigió el Santo Padre a los participantes en la decimoquinta reunión plenaria de la Comisión Pontificia de las Ciencias Sociales, a los que recibió en el Palacio Apostólico. Sigamos gozando de la sabiduría de este hombre de Dios, mientras el mundo le continúa difamando sin sentido. El discurso está traducido por la agencia ZENIT.
"Queridos hermanos en el episcopado y en el sacerdocio,
distinguidas señoras y señores:
Con motivo de vuestra reunión para la decimoquinta sesión plenaria de la Academia Pontificia para las Ciencias Sociales, estoy contento de tener esta ocasión para encontraros y expresaros mi aliento hacia su misión de exponer y fomentar la Doctrina Social de la Iglesia en las áreas de las leyes, la economía, la política y las demás ciencias sociales. Agradezco a la profesora Mary Ann Glendon sus amables palabras de saludo, os aseguro mis oraciones para que el fruto de vuestras deliberaciones siga atestiguando la validez duradera de la enseñanza social católica en un mundo rápidamente cambiante.
Tras estudiar el trabajo, la democracia, la globalización, la solidaridad y la subsidiariedad en relación con la doctrina social de la Iglesia, vuestra Academia ha elegido volver a la cuestión central de la dignidad de la persona humana y los derechos humanos, un punto de encuentro entre la Doctrina de la Iglesia y la sociedad contemporánea.
Las grandes religiones y filosofías del mundo han iluminado varios aspectos de estos derechos humanos, que están concisamente expresados en "la regla de oro" que encontramos en el Evangelio: "Lo que queráis que os hagan los hombres, hacédselo vosotros igualmente" (Lucas 6,31; cf. Mt 7,12). La Iglesia siempre ha afirmado que los derechos fundamentales, por encima y más allá de las diferentes formas en que han sido formulados y los diferentes grados de importancia que hayan tenido en los diversos contextos culturales, deben ser mantenidos y concedido el reconocimiento universal porque son inherentes a la naturaleza misma del hombre, que ha sido creado a imagen y semejanza de Dios. Si todos los seres humanos han sido creados a imagen y semejanza de Dios, comparten en consecuencia una naturaleza común que los une y que reclama el respeto universal. La Iglesia, asimilando la enseñanza de Cristo, considera a la persona como "lo más digno de la naturaleza" (S. Tomás de Aquino, De potentia, 9, 3) y ha enseñado que el orden ético y político que gobierna las relaciones entre las personas encuentra su origen en la propia estructura del ser humano. El descubrimiento de América y el consiguiente debate antropológico en los siglos XVI y XVII llevaron a Europa a una mayor conciencia sobre los derechos humanos como tal, y de su universalidad (ius gentium). La época moderna ayudó a dar forma a la idea de que el mensaje de Cristo -porque éste proclama que Dios ama a todo hombre y mujer y que todo ser humano está llamado a amar a Dios libremente- demuestra que todos, independientemente de su condición social y cultural, por naturaleza merece la libertad. Al mismo tiempo, debemos recordar siempre que "la libertad misma necesita ser liberada. Es Cristo quien la hace libre" (Veritatis Splendor, 86).
A mitad del siglo pasado, tras el gran sufrimiento causado por las dos terribles guerras mundiales y por los indecibles crímenes perpetrados por las ideologías totalitarias, la comunidad internacional adoptó un nuevo sistema de leyes internacionales basado en los derechos humanos. En éste, parece haber actuado en conformidad con el mensaje que mi predecesor Benedicto XV proclamó cuando llamó a los beligerantes en la Primera Guerra Mundial a "transformar la fuerza material de las armas en fuerza moral de la ley" ("Mensaje a los líderes de los Pueblos Beligerantes", 1 de agosto de 1917).
Los Derechos Humanos se convirtieron en el punto de referencia de un ethos universal compartido - por lo menos a nivel de aspiración- para la mayor parte de la humanidad. Estos derechos han sido ratificados por prácticamente todos los Estados del mundo. El Concilio Vaticano II, en la Declaración Dignitatis Humanae, así como mis predecesores Pablo VI y Juan Pablo II, se refirieron fuertemente al derecho a la vida y al derechos de libertad de conciencia y religión como el centro de esos derechos que brotan de la propia naturaleza humana.
Estrictamente hablando, estos derechos humanos no son verdades de fe, a pesar de que pueden descubrirse - e incluso iluminarse plenamente - en el mensaje de Cristo que "revela el hombre al propio hombre" (Gaudium et Spes, 22). Éstos reciben una confirmación ulterior desde la fe. Con todo, está claro a la razón que, viviendo y actuando en el mundo físico como seres espirituales, hombres y mujeres perciben la presencia de un logos que les permite distinguir no sólo entre lo verdadero y lo falso, sino también entre el bien y el mal, entre lo mejor y lo peor, entre la justicia y la injusticia. Esta capacidad de discernir -esta actuación radical- hace a toda persona capaz de aprehender la "ley natural", que no es otra cosa que una participación en la ley eterna: "unde...lex naturalis nihil aliud est quam participatio legis aeternae in rationali creatura" (S. Tomás Aquino, ST I-II, 91, 2). La ley natural es una guía universal reconocible por todos, sobre la base de que todo el mundo puede comprender y amar recíprocamente a los demás. Los Derechos Humanos, por tanto, están en última instancia enraizados en una participación de Dios, que ha creado a cada ser humano con inteligencia y libertad. Si esta sólida base ética y política se ignora, los derechos humanos se debilitan ya que han sido privados de sus fundamentos.
La acción de la Iglesia en la promoción de los derechos humanos se apoya por tanto en la reflexión racional, como una forma en que estos derechos pueden ser presentados a toda persona de buena voluntad, independientemente de la afiliación religiosa que pueda tener. Sin embargo, como he observado en mis encíclicas, por un lado, la razón humana debe ser constantemente purificada por la fe, en la medida en que está siempre en peligro de una cierta ceguera ética causada por las pasiones desordenadas y el pecado; y, por otra parte, en la medida en que los derechos humanos necesitan ser reapropiados de nuevo por cada generación y por cada individuo, y en la medida en que la libertad humana - que progresa a traés de la sucesión de elecciones libres- siempre es frágil, la persona humana necesita el amor y la esperanza incondicionales que sólo pueden encontrarse en Dios y que llevan a participar en la justicia y la generosidad de Dios a los demás (cf. Deus Caritas Est, 18, y Spe Salvi, 24).
Esta perspectiva dirige la atención hacia uno de los más críticos problemas sociales de las décadas recientes, como es la conciencia creciente -que ha surgido en parte con la globalización y a presente crisis económica- de un flagrante contraste entre la atribución equitativa de los derechos y el acceso desigual a los medios para lograr esos derechos. Para los cristianos que con regularidad pedimos a Dios que "nos de el pan de cada día", es una tragedia vergonzosa que una quinta parte de la humanidad pase hambre. Asegurar una adecuada aportación de alimento, así como la protección de recursos vitales como el agua y la energía, requiere que todos los líderes internacionales colaboren mostrando su disposición a trabajar de buena fe, respetar la ley natural y promover la solidaridad y la subsidiariedad con las regiones y pueblos más débiles del planeta, como estrategia más eficaz para eliminar las desigualdades sociales entre países y sociedades y para aumentar seguridad global.
Queridos amigos, queridos académicos, al exhortaros, en vuestras investigaciones y deliberaciones, a ser testigos creíbles y consistentes de la defensa y de la promoción de estos derechos humanos no negociables que están fundados en la ley divina, os imparto de buena voluntad mi Bendición Apostólica.
[Traducción del original inglés por Inma Álvarez]
© Copyright 2009 - Libreria Editrice Vaticana]"